En
dónde hallar
–le
pregunté al maestro-
la
exactitud, la calma,
que
persigue mi voz para poder
quedarse
en el poema.
Me respondió:
No vive entre las cosas
ni con las criaturas-lo dijo Claudio-
no está en la cegadora
luz,
no en los ocasos, ni en los azules
silencios de la llama
todo es batida incierta:
no busques su lugar, su territorio,
hasta que escribas solo,
para nadie, sin vanidad, vacío,
como si hubieras muerto.
3 comentarios:
Muy bueno, Francisco. Me ha encantado la alusión a CR.
"Como si hubieras muerto" maravilloso.
Besos.
Quizá ahí está el secreto. En escribir para nadie, como si hubieras muerto.
En cualquier caso, un poemazo.
Un abrazo.
Francisco, excelente poema y magistral la lección del maestro. Pero creo que ahora el aprendiz se ahoga en muchas más preguntas... Una abrazo desde Sierra Morena.
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