viernes, 13 de enero de 2012

Alrededores

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Vuelve enero y vuelve anticiclónico. La contaminación atmosférica compite con la poética. Falta el viento que remueva, y todo queda esperándonos. Mientras, el nocturno frío, el cariñoso sol de enero. Hacia la luz del mediodía es posible salir, ver, leeer (que es leer mucho), conocer, apreciar, recordar, prevenir. Saber de los amigos que pueblan mis alrededores. Saber de la alegría de Julio Más (hoy quiero acentuarlo) por la buena acogida de su agua de brújula. El Cultural de El Mundo sitúa su libro como uno de los cinco mejores del año, lanzándolo hacia el premio Nacional de Poesía del año que comienza. Creador de mundos lo llama. Ojo al elogio. Saber de mi alegría al recibir un libro de Mari Cruz Agüera, la poeta murciana de la nada o la gloria, que, editado en Estados Unidos, tiene la gentileza de citarme. Es la de Mari Cruz una poesía de la presencia y de la ausencia de los cuerpos, siempre atenta al discurso de la piel propia y ajena, tan bella y tan en primera persona que me hace sentir vergüenza de mis enjutas abstracciones.

También en los alrededores del mediodía de enero, la tensión por los manifiestos de Ángel Guinda. El martes, en Libertad8, proclamó la necesidad de una poesía violenta, capaz de enfrentarse a la violencia estructural de una sociedad política que destruye al individuo para convertirlo en ciudadano, rebeldía frente a sumisión. Nada dice que no sea cuanto canta. Ángel irreductible. Y muy cerquita, casi rozándome, la vuelta al circuito de Emilio Ruiz Parra, sano ya de sus preocupaciones físicas, y atento a repartirse francamente. Tantas cosas han muerto que no hay más que el poeta, que diría Alberti.
Elisabeth

Y la poeta, mi queridísima Elisabeth Porrero, que por fin verá en Ciudad Real editado su primer libro, Peregrino de sueños, junto a quien quiero estar. Como me gustaría estar con Paco Moral que publica en Celesta, joven editorial que promueve Rafa González y que ha elegido el mítico Comercial para hacerlo visible.

Enero de frío y sol que me rodea. Cercado, ayer releí varios de los números de Caballo verde para la poesía y de Poesía de España. Vieja poesía impura.

(Stalker, el mago mallardiano de Lost in Marienbad, ha dejado de alimentar su blog. Es una mala noticia para mí, para muchos. El blog queda, sus entradas. La esperanza es posible).

LOST IN MARIENBAD

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Caro mío, gracias por tu alegría, y sobre todo por esos versos que inspiran otros. Cuando leo palabras como las tuyas sé que ya he alcanzado la verdadera gloria, el afecto. Abrazos enormísimos.

Mari Cruz Agüera

fcaro dijo...

Mari Cruz, de la lectura nace la escritura. No hay mayor provocación que leer. Gracias por tus versos. Un gran abrazo. Paco.