No sé el orden, ni su prioridad, pero sé que es poeta, que es gallega y que es amiga. La conocí en la stoa griega de Valverde, en el foro romano, en la más pura poesía. Conocí sus escritos primero, después el agua del mar en su mirada, la belleza con que apacigua a los vientos. Escribe sin piedad, desamparada. Escribe sin papel mientras pasea, tan cerca de la Torre de Hércules. A veces en la nocturnidad de los turnos. Mientras oye música o atiende la cocina. Escribe en el bosque, en la agonía celta del verde, en la ruralidad de los castaños. Es poeta. Ha ido creciendo en el oficio de escribir. Con voluntad, con parsimonia. Aguzando el oído a la intención del verso. La posada del alma siempre está abierta. Todo le impresiona. A veces viene al sofoco de Madrid, a la centralidad del cemento, a la arboleda domesticada. No es su tierra. Aquí se disminuye. Tiene cerrado un poemario "Cuando a madera húmeda" y está en otro. Sólo sabe escribir desde la verdad y hacia la verdad. Una mujer que escribe, una más para algunos lectores, pero para ella escribir es andar, gozar, conocer, sonreír, buscarse, someterse, contemplar, ser el mar, dejarse confundir por las gaviotas, remover las arenas con las sombras. Tal vez amar.
Me envía esta foto y este poema en satisfacción de una solicitud hecha por mí..
La humedad
sigilosa del musgo,
los caminos del verde,
cuán antiguos dormitan.
Es de lluvia cerrada el aire suyo.
Y son lluvia las tardes, las fuentes del ayer
en los difusos rostros de los dioses.
Del ayer este eco de amapolas
que viene con el agua, la memoria,
el musical linaje de las hojas.
A dónde mira el cedro
si al pájaro no acoge, si desprecia.
Cuándo se anunciará la primavera
si el ciprés toca el cielo
y aún es dulce
la piedra que nos muerde.
Qué lejos los caminos,
la fatiga animal del horizonte.
Cuán antiguos dormitan.
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Primero amiga, gallega y poeta eso nunca lo he tenido claro pero nunca voy a mirar la definición en el diccionario, camino con la poesía cuando ella se deja.
ResponderEliminarVoy a ponerme tus palabras de bufanda para los días en que hace frío y las palabras se congelan,me has hecho el regalo más hermoso que podrían hacerme.
Graciñas, por confiar en mi, por ser la persona que eres.
Te debo el abrazo cuando de nuevo sea el cemento mi camino.
Olga Pais, me declaré fan suya hace ya mucho, cuánto ha llavido Paco, poemas y más poemas, cientos de ellos, y muchos más que siguen en las manos.
ResponderEliminarUn abrazo para ambos
Marian
Olga,
ResponderEliminarEres toda una cadencia armónica y controlada como las olas de tus mares. El poema es todo un lujo,te envuelves en él con ternura de mujer que cala en los pormenores de la naturaleza hasta alcanzar cuotas insospechadas de belleza en el quehacer de las aspiraciones de la propia vida.En cada verso se respira con grandeza tu propio yo con un lenguaje sublime y noble, moldeado en una técnica precisa y completa.
Ha sido un verdadero placer este encuentro.
Máximo
No hay ni una palabra mal dicha, nada que no sea cierto. Es Olga una poeta que crece a un ritmo admirable y una persona que se mantioene fiel a unos valores que la hacen única... nunca deja de aprender, mirar, entusiasmar. Mi noción de mar, como ella sabe.
ResponderEliminarbesos y abrezos para los dos.